MEDIOS, GOBIERNO Y
DISCURSOS CONTRA INDÍGENAS EN EL CAUCA
Por
Hernando Uribe Castro
Magíster en Sociología
Es evidente la llave entre el
gobierno Nacional y los medios privados de comunicación en la producción de la
manipulación mediática frente al caso de las acciones colectivas desarrolladas
por los indígenas en Toribío en el departamento del Cauca. Los indígenas como
repertorio de acción colectiva desean desalojar a los actores armados del
conflicto (fuerzas militares, policía y guerrilla) de su territorio,
destruyendo sus trincheras y confrontado cara a cara cada uno de estos actores,
según ellos, en defensa de su territorio
como escenario de paz.
Los medios masivos de comunicación han
hecho uso de las imágenes del desalojo de los soldados -quienes en medio de
llanto y rabia se ven impotentes de responder, como bien saben hacerlo- a
través del uso de la fuerza-, a las acciones de la guardia indígena-, para
construir el sentido de opinión particular de ellos (los medios y el gobierno)
y lograr generalizarlo como sentido de “opinión nacional” Este sentido de
opinión, viene polarizando a un número importante de ciudadanos, quienes ven en
las comunidades indígenas una extensión de los grupos armados al margen de la
ley, y no por el contrario, un grupo social que reivindica el derecho de sus
territorios, su soberanía, pero sobre todo la posibilidad de vivir en “paz” y
de salvaguardar su propia integridad, ante la incapacidad histórica del Estado
Colombiano de hacerlo.
Acompaña las imágenes en los medios
informativos, los discursos, que como dispositivos poderosos de convencimiento,
son utilizados para legitimar las acciones del gobierno como respuesta a estas
acciones de los indígenas, para llamar y focalizar toda la atención y mantener
así los públicos pendientes de sus noticieros, para hacerles sentir que están
informados de todos los acontecimientos. Discursos como “Colombia está
indignada” o “crece indignación en Colombia por el maltrato de los indígenas”
son meros hechos de sentido común que construyen una falsa opinión pública
colombiana generalizada.
Los medios de comunicación han
sufrido un proceso de instrumentalización, como consecuencia de un
universo de dominación económica y política que pesa sobre sus propias
producciones. Una estrategia para lograr lo anterior es a través de la crónica
de sucesos, que se convierte en un elemento de distracción, sobre todo en la
televisión, para llamar la atención sobre hechos distintos a los que
verdaderamente son importantes. Por
ejemplo, como ha sucedido con el uso de imágenes que muestran a los soldados
cargados por los indígenas, o las lágrimas del Sargento García, se
espectaculariza el drama, el crimen, la violencia, como instrumentos simbólicos
a través de los cuales se controla la mirada del espectador para desviar su
interés y construirle así una visión de los hechos.
Los medios de comunicación tienen la
capacidad de imponer unos principios de visión del mundo, es decir una especie
de prisma a través de la cual se observa los acontecimientos. Por ejemplo,
estos se centraron en los hechos de “maltrato a los soldados” que por supuesto les
generan más rating y sobre los que descargan una serie de valoraciones,
prejuicios y sanciones de discriminación, estigmatización y rechazo frente a la
comunidad indígena, que en los hechos verdaderamente claves como es de modo
particular de los efectos del conflicto armado en las comunidades campesinas
que se encuentran en medio del fuego cruzado desde hace mucho tiempo y del que
han sido víctimas de modo permanente. Para los grupos indígenas, los medios no
logran, y tampoco les interesa comprender, que su pueblo esta desarrollando un
conjunto de acciones colectivas simbólicas, pacíficas por el derecho a vivir
dignamente sus territorios.
A la voz del gobierno se le da más
difusión que a la voz de los indígenas[1].
Y de esto, las fuerzas privadas y del gobierno aprovechan. Por ejemplo el
presidente Santos ante las acciones de resistencia de los indígenas expresaba: “No
vamos a tolerar que vuelvan a agredir a nuestros soldados, lo
de ayer raya en lo criminal”,[2] “Nuestro enemigo
es el grupo terrorista de las Farc, no los indígenas. Sin embargo, todo tiene
su límite"[3] Discursos
estos que pueden criminalizar a campesinos e indígenas.
El problema con todo esto es que la
mayor parte de los colombianos construyen sus referentes de la realidad a
partir de los referentes impuestos y manipulados por los medios y no logran
discernir entre lo que es y lo que no es. Los ciudadanos terminan creyendo todo
lo que la televisión muestra, expresa y construye. Pero lo más preocupante aun
es que además de ello, los medios de comunicación son los principales
encargados de construir la realidad y la historia colombiana en la actualidad.
[1] Asociación de
Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, Cxab Wala Kiwe http://www.nasaacin.org/noticias/3-newsflash/4340-los-medios-oficiales-le-hacen-eco-a-las-mentiras-de-los-militares
[2] Esmad de la Policía desaloja a indígenas en
base militar de Toribío, Cauca. El pais.com.co 18 de julio de 2012.
18 de julio de 2012